POLÍTICA

Con muerte de Barbosa, a la deriva futuro político de Rivera Pérez.

 ·       El panista hora nada más aspira a repetir en la presidencia municipal.

·     El sueño de ser gobernador se le esfumó.

·      Ahora si su futuro podría ser San Miguel...

Ante la partida del gobernador Miguel Barbosa Huerta, el futuro político del presidente municipal Eduardo Rivera Pérez  quedó “a la deriva”, por lo que el proyecto planteado desde que inició su administración,  que era el de ser candidato de la alianza PAN-PRI-PRD a la gubernatura, y con la ambición de manejar 120 mil millones de pesos anuales de presupuesto.

Tal vez Eduardo Rivera no contaba con la muerte del oriundo de  Zinacatepec, Tehuacán, su protector e impulsor en este proyecto transexenal, que ya es misión imposible, porque los escenarios cambiaron por completo, tanto para él, Rivera, como para las “corcholatas” barbosistas que se habían apuntado, léanse, Biestro, Olivia Salomón Etc.

Ante este nuevo panorama, Eduardo Rivera ha dejado correr “el rumor” que ahora buscará la reelección. Sabe que “sus canicas” ya no le alcanzan para buscar la gubernatura, tan es así, que ha dejado de realizar giras por el interior del estado.

Sin embargo, al nacido en el Estado de México, tampoco le alcanza para aspirar a repetir al frente del Ayuntamiento de Puebla y su futuro será el mismo de Claudia Rivera Vivanco, el fracaso y el ostracismo político. Una vez más al frente del Ayuntamiento sería una tragedia para los poblanos.

Y al contrario, ya sin la protección de Miguel Barbosa y ya sin la influencia de su padre putativo, Felipe Calderón Hinojosa, es posible que ahora sí Eduardo Rivera enfrente a la justicia por sus cuentas pendientes por el desvío de más de 400 millones de pesos de su pasada administración, delito por el cual fue  sancionado por el Congreso de Puebla con inhabilitación por 12 años para ocupar cargo público y una multa millonaria que no fue pagada. Más lo que se acumule de su segunda administración.